¿Conoces las 5 heridas emocionales? Son experiencias muy dolorosas que de alguna manera dejan una marca dolorosa en la mente o psique, que en todos los casos afecta significativamente la calidad de vida de las personas que las sufren, las heridas pueden provenir de traumas, relaciones tóxicas, pérdidas (por duelo), situaciones familiares graves. Explora aquí si tienes alguna herida emocional y cuál sería el proceso para tratarla.

¿Cuáles son las 5 heridas emocionales?

Rechazo: Esta herida ocurre cuando uno se siente rechazado, no amado o no aceptado. Puede surgir de experiencias tempranas de abandono, negligencia o falta de afecto por parte de figuras importantes en la vida de una persona, como padres o cuidadores.

Abandono: Esta herida está relacionada con el miedo al abandono físico o emocional. Puede surgir de experiencias reales de abandono, como la pérdida de un ser querido o la ruptura de relaciones significativas. Las personas que sufren de esta herida pueden tener dificultades para establecer relaciones sólidas o pueden sentir ansiedad cuando perciben cualquier signo de posible abandono.

Humillación: Esta herida se produce cuando una persona experimenta vergüenza, crítica constante o menosprecio por parte de otros. Puede ocurrir en situaciones de abuso emocional o verbal, bullying, o en entornos donde se desvalorice constantemente a la persona. La humillación puede llevar a la baja autoestima y a la inseguridad.

Traición: Esta herida se produce cuando una persona confía en otra y esa confianza es traicionada. Puede ocurrir en relaciones personales o profesionales, cuando alguien es engañado, manipulado o traicionado por alguien en quien confiaba. La traición puede generar un profundo dolor emocional y dificultades para confiar en otros en el futuro.

Injusticia: Esta herida se relaciona con el sentimiento de ser tratado injustamente o de manera desigual. Puede surgir de experiencias de discriminación, falta de reconocimiento o ser víctima de circunstancias injustas. Las personas que sufren de esta herida pueden experimentar ira, resentimiento y dificultades para perdonar.

¿Cómo saber si tengo alguna herida emocional?

Las heridas emocionales suelen tener sensaciones clave a nivel emocional, recuerda que es diferente por ejemplo con la herida emocional de abandono, si piensas que tu pareja podría salir de tu vida, pero luego reafirmas tu pensamiento y te das cuenta que no es así, eso no es una herida emocional, son solo pensamientos ansiosos.

Las heridas emocionales se ven así aquí te muestro unos ejemplos: 

Rechazo: Imagina que estás en un grupo de amigos y todos deciden hacer planes sin incluirte. Puedes sentirte excluido, no valorado y como si no pertenecieras.

Abandono: Supongamos que tu pareja, con quien tenías una relación sólida, de repente te deja sin explicación. Puedes experimentar un profundo sentimiento de soledad, desolación y miedo al futuro sin esa persona en tu vida.

Humillación: Si estás en una reunión de trabajo y tu jefe critica públicamente un proyecto en el que has estado trabajando duro, puedes sentirte avergonzado, menospreciado y con la autoestima disminuida.

Traición: Si descubres que un amigo cercano te ha estado mintiendo o hablando a tus espaldas, es posible que te sientas herido, traicionado y que pierdas la confianza en esa persona y en otras relaciones cercanas.

Injusticia: Si trabajas arduamente en un proyecto durante meses y, al final, alguien más recibe el reconocimiento y las recompensas, puedes sentirte indignado, resentido y como si no se te estuviera valorando correctamente.

Algunas personas pensarán… ¿Pero esto no es la normalidad, actuar así?

Realmente no… Por eso las heridas emocionales son tan peligrosas, nos hacen funcionar desde lo que no funciona. y cuando ocurren cosas en nuestras vidas, las tomamos por el peor camino.

El pensamiento ideal cuando ocurre lo que te mencionaba en los ejemplos anterior

Cómo actuaría una persona sin heridas emocionales

Rechazo: En lugar de sentirse personalmente herido o excluido, esta persona podría reflexionar sobre la situación de manera objetiva. Podría considerar que los planes pueden haber surgido de manera espontánea o que simplemente no estaban al tanto de sus deseos de participar. En lugar de sentirse rechazado, podría buscar otras actividades o intereses que disfrute por su cuenta o con otros amigos.

Abandono: En lugar de entrar en pánico o caer en un estado de desesperación, esta persona podría tomarse un tiempo para procesar la situación y reflexionar sobre sus propias fortalezas y recursos personales. Podría buscar el apoyo de amigos cercanos o familiares y concentrarse en actividades que le brinden alegría y satisfacción personal.

Humillación: En lugar de permitir que la crítica de los demás afecte su autoestima, esta persona podría reconocer que la opinión de los demás no define su valía personal. Podría tomar la crítica constructiva como una oportunidad para crecer y mejorar en sus habilidades, sin permitir que afecte su sentido de autoestima.

Traición: En lugar de caer en un estado de desconfianza o resentimiento hacia los demás, esta persona podría abordar la situación con madurez y empatía. Podría comunicarse abierta y honestamente con la persona que lo traicionó para comprender mejor sus motivaciones y sentimientos. También podría establecer límites saludables en sus relaciones futuras y trabajar en fortalecer la confianza en sí mismo.

Injusticia: En lugar de permitir que la injusticia lo consuma con ira y resentimiento, esta persona podría buscar formas constructivas de abordar la situación. Podría buscar soluciones prácticas, como comunicarse con las partes involucradas o buscar apoyo de recursos externos, como un mediador o un consejero. También podría enfocarse en cultivar una mentalidad de gratitud y aceptación de las circunstancias que no puede cambiar.

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